domingo, 12 de agosto de 2012

Román, Leandro, la tristeza de un fútbol sin 10


Ayer se lesionó Romagnolli, nuestro armador y sufro su ausencia, por lo que pierde San Lorenzo, por las ganas que Leandro estaba poniendo para dejar detrás la lesiones y darnos todo lo que sabe.
De cara al campeonato y ya sin Román, es como si la magia se hubiera esfumado.


Pero Román...
Tuvo que pasar todo lo que pasó para que se disipe el humo y emerja claro lo que siempre estuvo a la vista de la mayoría, salvo deportólogos influyentes y los que cortan el bacalao en el fútbol nacional.
Pasó que el “aguerrido” Passarella y el “genial” Bielsa dejaron –nos dejaron- pasar 2 mundiales sin el mejor Riquelme, con selecciones sin identidad ni trascendencia, (lógico no estando Él) selecciones que no jugaron a nada pero realizaron grandes aportes a la retórica contemporánea tales como “la pelota no dobla”, “lo importante es el equipo”, “un buen técnico no necesita quien arme el juego dentro del campo”, “lo que se necesita es caudillo”, “un jugador no hace la diferencia”, “en el fútbol moderno todos los esquemas son relativos”, no tengo la energía que se necesita”, “el jugador moderno juega en todos los puestos”.
Uso el calificativo,  ”el mejor” Riquelme, como si tal calificativo, pudiera distinguir al Riquelme gambeteador y de pegada quirúrgica de sus primeros años, ya ganador de mundialitos con Pekerman, de aquel que agregó  goles con Bianchi como técnico, o aquel que definitivamente supo cargarse al hombro equipos siempre por debajo de su calidad, se tratara del Boca que llegó a humillar al Real Madrid, del Barsa que se comió a Van Gall, del Villareal que casi da el batacazo y hoy sólo se recuerda por el paso de Román, o este Román ya veterano que llevó al paroxismo lo que siempre lo distinguió de todos los que jugaron futbol luego de Diego en Argentina, lo que “los de antes” llamaban PANORAMA. Lo que lo emparenta con Bochini, Wellington, Ermindo, el Coco Rossi, el Beto Menéndez, el Beto Márcico, esa virtud de saber dónde está cada jugador, dónde está débil el equipo contrario, dónde el propio, cuándo hay que acelerar y cuándo dormir un partido, cuándo calesitear y cuándo meter un pase de 10 ó 40 metros para que un compañero quede cara a cara con el arquero, toda la coreografía a favor como si hasta los contrarios se sometieran a su geometría. Si no se hubiera inventado aún el GPS Román y su juego podrían haberlo propuesto a la imaginación de todos. Estar en cada momento en un lugar sabiendo todo lo que pasa alrededor, ser en fin estratega.
Pasó, también, que el buen técnico que es Pekerman tropezó dos veces con la misma piedra. Peor aún, tomó dos veces la misma errónea decisión de llevársela por delante: en final de Copa, faltando unos minutos y con la selección argentina arriba en el marcador lo sacó a Román para terminar perdiendo frente a Brasil. En el Mundial de Alemania lo saca cuando íbamos 1 a cero y el final ya lo sabemos.   
Pasó también que Diego, humano al fin aunque Dios con la pelota, creyera se podía prescindir de Román –el último armador de Argentina y uno de los dos o tres del mundo- aunque no hubiera entre sus convocados uno solo que cumpliera la función de ordenar un grupo que le llegó incendiado, más involucrado en internas que en la acción solidaria.
Pero no alcanzó. Fue necesario aún que Román se vaya de Boca, que su figura deje de jerarquizar las canchas de Argentina, para que hoy todos los periodistas deportivos y supradeportivos descubran lo que siempre supo la hinchada de Boca, lo que siempre supimos los que creemos que existe una escuela argentina de fútbol, con armador, control de pelota y territorio, toque, manejo de los tiempos, corazón y elegancia: que Román es irremplazable y con su partida perdemos todos.
Y allí los tenemos a los "especialistas", hechos un mar de lamentos después que se cansaron de cuestionar la vigencia de Román, su carácter, ocupados unos en ocultar otros en ignorar que pasaron dos décadas sin que los clubes promuevan nuevos armadores, ya que se dedicaban a producir “todo-terrenos” para vender en Europa, guita rápida aunque terminen volviendo en meses, derrotados antes de despegar. 
Así, nos quedamos lamentando que se retirara Zidane, aquel que ya campeón mundial y jugando en el Real atravesó toda la cancha para saludar a un Riquelme al que reconoció como su modelo de jugador. O envidiamos a Iniesta, como si España viniera de abundar en la producción de estrategas.  
En una Argentina que todo se recompone, el curso del fútbol marcha a contramano: donde la identidad se reafirma se gesta un fútbol ajeno, donde se avanza en deportes hasta hace poco minoritarios vimos unos Juegos olímpicos sin nuestra selección juvenil porque no clasificó.
No sé, quisiera ser optimista y creer que Román volverá, que lo de Leandro no serán los ligamentos cruzados, que  en cualquier canchita de cualquier lugar del país despuntarán nuevos estrategas y en los clubes no abortarán ese renovado encuentro del fútbol, nuestro fútbol con sus fundamentos. Pero por ahora sólo son ganas.

martes, 7 de agosto de 2012

Banco Ciudad. Algo más está podrido en la ciudad


En relación al proyecto de la diputada Diana Conti para que que los depósitos generados por causas judiciales con asiento en tribunales federales y Nacionales se acrediten en el Banco Nación, una oficina del Banco Ciudad está enviando a sus clientes el mensaje que transcribo más abajo. 
Estos depósitos se venían efectuándo en el Banco Ciudad y al parecer conforman el 30% del total de depósitos del Banco. 
Sin ser ni abogado ni experto en cuestiones bancarias, creo que este dato no tiene ninguna pertinencia a la hora de definir si los fondos van al Nación o no. Los depósitos judiciales no pueden ser utilizados para negocios por nadie, tampoco por el Banco, por los que, salvo el monto que recibie seguramente por su custodia -inmensamente inferior a los 6000 millones de pesos que sumarían esos depósitos- tener o no tener esos depósitos no cambia la solvencia del banco ni en más ni en menos)
También se está usando el argumento de que se pone en peligro el empleo de los trabajadores afectados a actividades relacionadas con estos depósitos. Quienes tenemos el desgraciado status de clientes de este banco sabemos que el personal de la sucursales no da a basto en su labor. Me ha pasado ir a hacer una consulta por mi caja de ahorro a las 11 y salir a las 13 ó 14 ya que dos ó tres personas tenían que atender reclamos -todos complejos- de cientos.
Dejo de lado el reclamo local, porque al tratarse de cuestiones federales el banco que obviamente debe atenderlas es el Nación. Caso contrario ¿por qué no el Provincia de Bs. As.? ¿el de Córdoba ? 
Transcribo la nota y mi respuesta

2012/8/7 Banco Ciudad
Estimado cliente:
Le informamos que por medidas de fuerza se verá afectada la atención al público mañana miércoles 8 de agosto, por lo tanto le sugerimos efectuar sus operaciones a través de nuestros canales electrónicos (Cajeros Automáticos o Home Banking)
Le pedimos disculpas por las molestias que esto pueda causarle, pero esta acción de protesta obedece al rechazo de los empleados del Banco Ciudad al proyecto de Ley presentado por la diputada Diana Conti. Dicho proyecto impulsa el traslado de los depósitos judiciales que actualmente se hacen en el Banco Ciudad a otra institución bancaria.

Le agradecemos por su comprensión.

Te enviamos este mail por ser cliente del Banco Ciudad y/o haber utilizado algunos de los servicios de nuestro Sitio Web. Si no querés recibir más información podés darte de baja de forma segura y automática desde el pie de este mensaje.

MI REPUESTA
A ver si entiendo: 
1-¿Uds llaman "otra institución bancaria" al Banco de la Nación Argentina"?
2- Los depósitos judiciales ¿no son depósitos en custodia del Estado? ¿No corresponde  entonces que vayan a ese banco?
3- En la sucursal en que tengo caja, en el Cid Campeador, el promedio de espera de cada trámite es de hora y media a dos porque los empleados no dan a basto. ¿no será mejor que reubiquen empleados para atender mejor a quienes padecemos esta falta de personal en lugar de decir que van a peligrar puestos de trabajo?
Este mail me pareció una falta de respeto. Doble porque nadie se dignó a firmarlo
Lamentable
Mario Burgos

domingo, 5 de agosto de 2012

"Elefante Blanco" Más bien AMARILLO

La vi la semana de su estreno.
Hoy, Pasado más de un mes, buscaba en la cartelera algo para ver, después de darnos el gusto el viernes -mi hija y yo- con ATRACO, un buen guión y buenas actuaciones para encarar la historia por un costado imprevisto.
Y en la cartelera ví la fotito y recordé que esta película, "Elefante Blanco" es algo digno de no ver.
- Discriminatoria:
1- la gente de las villas sería incapaz de enfrentar sus problemas, por suerte está la iglesia, algo impotente ante la maldad, pero nunca comprometida con los malos.
2- En la villa no habría laburantes. La gente que hace buena parte de todo el laburo que se hace en Capital no existe. Sólo hay indigentes y narcos.
- Mentirosa:
1- el CESAC que funciona en el verdadero Elefante Blanco es mostrado como salita de la iglesia cuando con sólo ir por ahí se sabe que es municipal, es decir una conquista de la gente del barrio.
2- Las autoridades eclesiásticas de Capital (¿Bergoglio?) se preocupan cuando se acaban los fondos,
3-En un homenaje a Mujica en la villa 31 no hay una sola bandera de la JP, del peronismo (pregunto: ¿nunca escucharon un discurso de Mujica?)
- Pedante, con la pedantería del "apolítico": el padre Julián, el gran salvador de los pobres, en realidad tiene menos calle que el canal de la Mancha, tanto que termina sosteniendo un arma sin darse cuenta frente a un grupo de canas para que lo hagan un colador. nada de los que hace en la película está a la altura de lo que hicieron los anarquistas, los comunistas, los peronistas desde el ´45. lo que hicimos en los ´70, lo que hacía el MVP de Chejolán, Mujica, el Grupo Octubres con su teatro militante, ¡Pino, con la Hora de los Hornos!, Novak, Angelelli, De Nevares, los comedores y movimientos piqueteros desde los ´80, los curas obreros y los curas villeros.
Pedante porque toda la inteligencia que se les reconoce a los del barrio es lo que podríamos llamar "habilidad de desplazamiento", lo que cualquier animal muestra cuando se mueve en su medio mejor que un humano de ciudad; a la hora de circular por la villa, los curas buscan un cicerone, pero a la hora de pensar, basta con ellos.
Lamenté que la película fuera eso, por la gente que vive en Villas y no se merece esa versión berreta de su existencia.
También porque Trapero hizo mejores cosas y en todo caso ninguna con ese color "sociedad de beneficiencia". Tal vez la presencia de Santiago Mitre en el guión explique en parte este producto que, justo es decirlo, no llega a desarrolar un discurso tan reaccionario como su anterior "El estudiante".
Lamentable porque aunque Darín evita minuciosamente cualquier conflicto con los poderes fácticos  no curte el fascismo berp de su amiga Susana y siendo un excelente actor compone un padre Julián que no le llega  a los talones, por ejemplo, al Padre Mario que hace Marrale en "Las Manos".
Lástima porque Martina Guzmán además de excelente actriz es una de las mujeres más bellas de Argentina, pero esta película llega hasta afearla en un romance que no calentaría a un náufrago recuperado después de años de soledad. Lástima tanto sacrificio, sangre y cultura de la resistencia para que venga una pelicular así a desmerecerlos.
Lástima porque se la presenta como un homenaje a Mujica y quienes lo conocimos sabemos que no le hubiera dedicado ni una puteada.
No entendía a qué vino tanto esfuerzo de producción, elenco, etc. hasta que al día siguiente de verla escuché en "678" un debate entre un defensor de la despenalización del consumo de sustancias y un cura que se oponía y diciendo trabajar en villas dijo "nosotros sabemos cómo son las cosas ahí, estamos ahí, no hacemos teoría y no queremos que se tome una medida apresurada, porque va a ir en perjuicio de los pobres"... EL SACARLE A LA CANA LA PRERROGATIVA DE LLEVARTE POR PORTACION DE CARA!!!!!????
Ahí entendí: lo sepa o no lo sepa Trapero "Elefante..." es un intento de construir un discurso villero desde el "apoliticismo" eclesiástico.
Dela bandera Vaticana, Elefante blanco elige el color amarillo. Villero pero light,  un ensayo desde afuera de la experiencia resistente que nuestro pueblo supo construir desde aquel grafitti trazado en una pared descascarada a mediados de los ´50: " LOS YANKIS, LOS RUSOS Y LAS POTENCIAS RECONOCEN A LA LIBERTADORA, VILLA MANUELITA NO"